El desarrollo del módulo se estructuró en tres instancias: 1- La enseñanza virtual, principios básicos de una propuesta pedagógica, 2- La evaluación en contextos de educación no presencial de emergencia y 3- La virtualidad en la enseñanza. Los tres ejes se llevaron a cabo mediante recursos digitales (Google Meet para los encuentros sincrónicos, y Google Classroom para los asincrónicos), de modo tal que la capacitación presentó dos estrategias: el desarrollo de los contenidos, por un lado, y la inmersión en la virtualidad vivenciando el rol de alumno, por el otro.

El trabajo final que debieron confeccionar los asistentes consistió en la aplicación de lo aprendido mediante la selección de un tema de la propia materia y el diseño de una secuencia didáctica contemplando los principios pedagógicos, las estrategias y los instrumentos tecnológicos abordados durante la capacitación. Incluyó una apertura para recoger los conocimientos previos, expectativas, errores comunes, intereses y asociaciones que realizan los estudiantes con respecto a la temática, la selección y construcción de contenidos y recursos didácticos multimedia previendo un cursado virtual, una secuencia de actividades centradas en el desarrollo de la comprensión de los estudiantes mediante un rol activo, y la formulación de instrumentos de evaluación apropiados para cada una de las instancias, desde la perspectiva diagnóstica, formativa y sumativa.

Cada participante presentó evidencias de lo producido, en muchos casos capturadas directamente desde los cursados reales de sus alumnos, en los cuales fueron incorporando lo aprendido en la capacitación, resultando instancias muy ricas y de aplicación directa en pos de hacer más efectiva su propia acción docente en proceso. Junto a las evidencias solicitadas, cada docente además confeccionó un informe de reflexión, en donde justificó las decisiones tomadas, conectando la teoría con su transferencia práctica a las aulas virtuales y a los temas concretos.

La participación de los docentes fue muy importante, y las aplicaciones realizadas demostraron un gran nivel de apropiación de los temas abordados, y el aprovechamiento efectivo –y en muchos casos, inmediato- tanto de los principios pedagógicos ofrecidos como de las herramientas técnicas disponibles para llevarlos a la práctica.
Al recorrer las aulas virtuales que cada docente había creado, fue posible participar de los intercambios y vivenciar la interacción entre docentes y alumnos.